En primer lugar, les saludos mis hermanos y hermanas que lean este testimonio. Deseo agradecer a Dios por sus misericordias que él tiene en favor de mi vida, una de esas bondades consiste en haber permitido que participara en el grupo GELC en mis años universitarios, como también ahora. Durante mi época de estudios, el grupo GELC estaba iniciando sus labores en las universidades de la zona de concepción (año 2009). En mi opinión personal durante esa época, el grupo GELC no era de mi mayor agrado, y aquí es donde deseo contar una breve experiencia. Durante el mismo verano de 2009, tuve tres sueños repartidos en tres noches seguidas. En la primera noche soñé que iba junto a un grupo de hermanos predicando en una población nueva, dicho sea de paso, yo no conocía ninguno de los hermanos. La segunda noche, y segundo sueño, me encuentro con unos jóvenes, que tampoco conocía, los cuales me cuentan que está intentando entrar a predicar a un colegio, pero que no se les ha dado la oportunidad de hacerlo. Ante esto, les invito a la casa de un familiar cercano a orar. Mientras estamos orando, ocurre algo así como un temblor, que sacude la habitación donde estábamos, esto se repite por tres veces. En el sueño, entendíamos esto como la confirmación del Señor a nuestra petición. Finalmente, en el tercer sueño, la tercera noche. Me encuentro en el mismo sector que el día anterior, pero esta vez con una gran cantidad de niños predicando el evangelio. Luego, nos dirigimos a entregar el servicio al templo, pero mi sorpresa era que el localcito en el que entregábamos el servicio, se encontraba dentro del mismo colegio por el que habíamos orado. Siendo esto así, ingresábamos al colegio, y allí estaba la iglesia donde terminábamos glorificando al Señor. Habiendo tenido estos sueños, sin darme cuenta inmediatamente, el Señor cambió la disposición de mi corazón hacia el grupo GELC. Luego una vez iniciado el año universitario, casi a finales del primer semestre me encuentro con que “Los del Camino” habían iniciado obra en mi casa de estudios. Muy gustosamente comencé a participar en este grupo, donde encontré hermanos y amigos en el Señor, viviendo momentos inolvidables que marcaron mi vida en adelante. Mas tarde, el Señor me permitiría desempeñarme como jefe del grupo por algún tiempo, hasta que finalizada mi etapa de estudiante abandoné la universidad para entrar al mundo laboral. ¿A que quiero llegar con mi experiencia? Se, que aún hoy, cuando el grupo ya está masificado, y visibilizado en nuestras iglesias, aún existen jóvenes que no se comprometen a participar. Y espero que como el Señor cambió mi disposición hacia el grupo, lo haga con usted joven, que esta experiencia pueda servir para entender que el Señor obra plenamente en las universidades también, y que el alumnado de cada institución también necesita oír el mensaje del evangelio. Termino mi expresión de gratitud, diciendo que, al día de hoy, el Señor me ha permitido volver al grupo gelc, ya no como estudiante, sino como hermano guía de una universidad, y he visto la bondad del Señor también en esto. Mi deseo es que Dios nos bendiga grandemente, y nos prepare para entregar lo mejor de nuestro servicio a él, como dice la escritura: “Tu pueblo se te ofrecerá voluntariamente en el día de tu poder” Salmo 110:3a.
Al Señor pertenecen la honra, la gloria y la alabanza.
